Zero house surge a partir de una geometría pura. Tras un
juego de apertura del volumen principal surgen dos espacios exteriores que caracterizan
y le dan personalidad a la vivienda, en primer lugar con la terraza cubierta de
acceso, y por otro en la parte trasera el patio semiprivado al que se vincula
la habitación principal.
Se organizan los espacios de servicio en las zonas centrales
y las circulaciones y resto de programa se desarrollan a su alrededor. La
vivienda vuelca hacia el jardín y la piscina.
En cuanto al programa dentro de una superficie interior de 224 m2 construidos consta de:
Zona de día compuesta por salón, cocina comedor y estudio
Zona de servicio compuesta por aseo, almacén y zona de armariado.
Zona de noche compuesta por dos habitaciones y dos baños completos.